Regalo

Pasa el año y uno acumula ya cansancio entre otras cosas, luego de las fiestas patrias se viene todo como de sopetón y no nos damos ni cuenta cuando ya estamos el 24 de diciembre a las 7 de la tarde en algún mall y luego abrazando a gente que uno ni conoce para el año nuevo. Se que es pronto para analizar el año, pero sin duda algo bueno y gratificante de este, a sido el blog, que de a poco me lo tome en serio, sin esperanzas de nada pero escribiendo con gusto las metáforas de este corazón de papel que me pusieron al nacer, agradecer de paso también a la gente que se toma el tiempo de leer aunque no posteé, no importa, se que lo hacen, en especial alguien que me lee porque me la tope en el metro y se dio el tiempo de mirar hacia atrás un rato, en fin, gracias.
Hay mucho que contar de este año que aun no termina, del que guardo penas, alegrías, momentos mágicos y segundos inolvidables, este año ha sido como toda una vida, que pese a lo difícil lo viviría otra vez sin duda.
Esta ves me di el lujo de traer una invitada para el blog, esta canción, significa mucho para mi, además que esta mujer es una de las pocas rubias que me gusta, con todo el respeto que se merece el blondo el agua oxigenada y otras especies, el pelo negro es más de mi agrado (perdón me desvié del tema). La canción se llama sour time de la banda británica Portishead, es un tema antiguo, pero para mi es como si me lo hubieran escrito ayer mientras caminaba por santiago. No le pego mucho al ingles, a si que si alguien tiene una mejor traducción de este tema lo agradeceré. Hay algo mío también para talonear a la invitada Beth Gibbson.


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Regalo.

Hablare en verso
Por que los suspiros
Ya no me caben en el pecho
Y se desbordan
Como frases dolorosas
que húmedas recorren
Dentro de mí
Sin encontrar salida
Y el silencio
Contempla mi dolor
Que no quiere aun morir.

Un suspiro
Un parpadeo
Quizá una lagrima

Lo q quiero
No lo entiendo
Es raro
Sentir paz
Mientras se cae
Poco a poco mi corazón

Y saber q hay piezas
Que no encontrare
Porque te las regale
Vivía sin ellas porque
Estabas tan cerca
Que parecía no faltarme nada
Pero ahora te vas...
Y a mi corazón le falta tu parte
Pero es tuya,
Te la regale.

Santo.
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Sour time (tiempo amargo)

Al aparentar uno puede encontrar,
Fantasías y rosas matutinas,
Frutas prohibidas,
Mentiras silenciadas;
Sutilezas que en mi desprecio.
Chocar, despedazarme,
Porque nadie me ama,
Es verdad,
Nadie como lo haces tú.
Qué soy yo y por qué?
Porque todo lo que he dejado
Es el recuerdo del pasado.
Oh! El tiempo amargo,
Porque nadie me ama,
Es verdad,
Nadie como lo haces tú.
Después del tiempo del sabor amargo,
De una inocencia desintegrada,
De semillas esparcidas,
De seres enterrados en vida,
Historias de nuestro simulado renacer,
Las circunstancias decidirán.
Porque nadie me ama,
Es cierto,
Nadie como lo haces tú.


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Recuerdos de un Sillón

Alguien Me dijo hace un tiempo que yo escribía prácticamente solo sobre el amor y esas cosas, lo pensé por unos días y busque algo distinto y a decir verdad me costo y al final no encontré nada.
Que podemos hacer si de alguna manera, al menos en mi caso escribo porque siento, más que por que pienso, es complejo el tema
Pero no me preocupa, siento que escribir es guardar los momentos, esos que duran 5 segundos, eso que pasa justo antes de mirarla, eso que sientes por un segundo cuando estas a 2cm. de su boca pero mejor aun a 3cm. de su corazón. Todos hemos querido que esos momentos fueran eternos, para mi esta es la forma de hacerlos vivir, pero no discrimino a los malos momentos tampoco, porque esos son los que enseñan y hay que recordarlos mas a menudo, como en este caso, de paso saludo a la dueña del sillón que hace ya un par de años que no me siento en el…





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En un Sillón.

Recuerdo que ardía de celos
Aunque el frío nos envolvía...

Y tenias mi corazón en tu mano
El que con cada latido golpeaba tus dedos
Y su sangre goteaba por mis labios
Hasta caer en tu oído
Con todo el peso de su verdad
Y luego el silencio con su eternidad.

Mas en tu mano continuaba mi latido
Que moría y se enfriaba
Tras cada mirada
Hasta secarse, secarse
En la densa oscuridad de la madrugada.

Y te llevaste mi corazón
Dejándolo en un sillón
Tan negro como la noche
Y se desangro
Manchándolo de negro dolor
De oscura melancolía…
Que se perdía en los azabaches pliegues del sillón…

Y aun sigue hay
Lo que quedo de un corazón
Sin que notes su presencia…
Lo que da más vida a su dolor
Es que no notaras mi ausencia.

Cansado, pero asi es la cosa....

Creo que hay distintos tipos de personas en el mundo, eso esta claro. Uno pasa mucho tiempo tratando de entender que clase de persona es y peor aun de aceptarse a si mismo. A mis 23 años compruebo cada día, que pertenezco a la clase de personas definidas como melancólicas, o como últimamente lo he dicho “un sentimiento con patas”. Si, suena gracioso, pero es la mejor forma que tengo de definirme. Ya lo sabia hace tiempo, pero pasa que a veces uno necesita hacer ciertos repasos, o simplemente es la introspección, que nos suele matar de a poco. Es cuando te preguntas, será normal esto? Alguien más pasara por esto? O lo sentirá de esta manera? Y pero aun, se atreverá esa persona a tomar la mano de otra…?
Creo que hay personas como tu y como yo estimada, que de alguna manera estamos hechos para sentir, para ser el corazón y el alma de este mundo tan frío que nos trata de opacar, que nos dice que nos asociemos en vez de que nos enamoremos, que dice disfruta en vez de ama (porque sabemos que amar implica dolor), que dice olvida en vez de recuerda, que dice mata en vez de perdona, que mide el amor por orgasmos y no por miradas sinceras, por compañías en vez de cariño sincero… y no quiero hablar del dinero porque sonare a resentido, me basta con sonar a sentido…



cansado


cansado de evitar que me evites,
cansado de pensar en ti,
cansado de escribir de ti,

manchando palabras
palabras que no te encuentran
que pelean entre si
se me atraviesan
me oprimen y tropiezan

para enmudecer
ante tu indiferencia,

que seca mi corazón
gota a gota
y no lo ves,

no ves mi negro dolor
ni mis rojas palabras

menos esta casi
transparente piel
que ya solo duele
y aunque lo odie
duele por ti.

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santo.